Dentro de la gran cantidad de suministros para hostelería Tenerife que hay, nos podemos encontrar con el lavavajillas. Es una de las máquinas más comunes en hostelería y debido a su carácter industrial y no doméstico, puede llegar a usarse mucho, lo que hará que se acumulen muchos restos en su interior. Los restos de comida, grasa, jabón, etc., pueden hacer que se acumulen gérmenes y también no hacer que rinda como debería hacerse.
La limpieza diaria del lavavajillas industrial
Aunque la limpieza puede hacerse semanal o quincenal en casa, esto no puede hacerse en un establecimiento donde se está utilizando en todo momento. Por ello, la limpieza debe ser hecha a diario. No se trata de un proceso complejo y permitirá alargar la vida útil del dispositivo.
Para la limpieza diaria hay que procurar eliminar todos los restos de comida de los platos y los restos de bebida de las copas o vasos antes de meterlos en el lavavajillas. Con ello, se evita que los restos queden atrapados en la máquina y que ésta pueda funcionar correctamente.
Con cada uso, hay que procurar que la puerta del lavavajillas esté abierta. Con ello se consigue que la humedad interior no se condense y pueda llegar a crear moho con el paso del tiempo, algo que puede afectar no solo a la maquinaria interna del dispositivo sino también a los cierres de la puerta.
Se debe utilizar un detergente de calidad para el lavavajillas. Los que no son de demasiada calidad suelen dejar residuos, lo que, al igual que pasa con la comida, puede hacer que la máquina no funcione como es debido. No hay que olvidarse de revisar el nivel de abrillantador para que todo esté reluciente.